Mi vida se truncó un día cuando la persona que estaba a mi lado le apareció una terrible y cruel enfermedad, bipolaridad.
Él se transformaba en un monstruo, y no era capaz de asimilar que era una enfermedad. La cual poco a poco se fue creciendo y cada vez destruía más todo lo que había a su alrededor sin saber parar y sin límites. Mi única salida fue poner kilómetros de por medio, romper con toda mi vida y empezar una nueva vida. 2 años separada y 8 de tortura.
47 años.